lunes, 21 de enero de 2008

Noticias


Prendo la tele cuando el aburrimiento ya no se me pasa con nada y es como una forma de no pensar en lo que piensa en mi cabeza. A eso le llamo que “me atropelle”, donde no requiere mi atención y da igual cualquier cosa.

También me ayuda a dormir, dándole la espalda y que solo llegue un murmullo.

Esa tarde corrí a dormir una siesta. Me desperté y en el noticiero pasaban una nota sobre una viejita aparentemente que fue secuestrada para sacarle el dinero de una pensión italiana.

Pensamiento 1: Uy! Espero que mi vieja no lo este viendo esto porque sino ella, sus amigas y sus parientes se hacen la cabeza. La fobia a esa edad es tan fuerte como en los nenes.

Termina la nota, publicidad de puertas blindadas, sigue con las caras de los conductores que pasan a una nota de verano en la playa.

Entiendan bien, no era la publicidad de la tanda. Era publicidad dentro del noticiero.

Pensamiento 2: Puteadas generalizadas. Al personal y dueños de la empresa que venden las puertas. Al creativo, a los empleados del departamento de publicidad del canal de TV, directivos del noticiero, dueños del multimedia y cualquier ser que tenga que ver de cerca y de lejos con que esto se concrete.

Pensamiento 3: como podes mirar a la cara a tu ser querido y amarlo sabiendo que hace estas cretinadas?

Pensamiento 4: que mensaje subliminalmente claro tan hijo de puta.

Pensamiento 5: nunca faltan noticias sobre robos, pero ¿que pasa sino? ¿Guardan en archivos? ¿Contratan actores?

Pensamiento 6: venden miedo para vender puertas. No alcanzan todas las puteadas y maldiciones que conozco en este y otros idiomas y gestos asociados.

Pensamientos 7: Como decía Tato Bores: “vermú con papas fritas y Good Show!!! “


(Esto pasa en un noticiero de canal de aire, en baires, argentina. El multimedio Telefe)

1 comentario:

rastelman dijo...

hace mucho ya que los limites estan corridos, desviados o literalmente borrados!
Nada los detiene a la hora de vender. De todo se puede sacar una ventaja diría u ruin personaje de una película que nos parece inverosimil y sin embargo ahi esta la realidad, tan a mano que nos "atropella".
Vos lo notaste pero miles no, o sea lo vemos pero no lo miramos y así mucha mucha data, toneladas de ella, llega a nuestro cerebro con la sola intensión de cambiar o incorporar hábitos de consumo en favor de un anunciante o de una cadena o de una nueva moda (pronta a ser reemplezada por otra)
Abrir los ojos es bueno!!!
bien hecho!