El aburrimiento me espetó
a la vera de un camino sin pasión,
donde hoy tampoco amaneció.
Dicen que el sol se perdió
en la maraña de horas muertas
en los brazos estancados de los días.
Polvo de estrellas
interfieren en el lagrimal
de pretéritos dolores,
que me abrazan siempre,
antes de dormir.
2 comentarios:
El aburrimiento es capaz de todo, Sil.
A veces se mezcla con depresión y quedamos en el "horno".
Cuando no estés aburrida, date una vuelta por mi blog. Te voy a recibir con bombos y platillos.
Besos desde Asterión.
pero llegará ese día
en que el sol caliente las almas
entibie las necesidades humanas
y nos haga renacer en forma de milagro
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